Usar extensiones de cabello es algo muy común entre las celebrities, pero no tanto entre las mujeres que somos, digamos, más normales o comunes. Hay muchos estigmas alrededor de su uso. Para empezar, a muchas nos da algo de recelo el lugar de donde pueden provenir o incluso el cómo cuidarlas.
No es casual que el uso de las extensiones de cabello sea algo tan normal y al mismo tiempo provoque tanto recelo. Gran parte de las mujeres, si bien, tienen en claro que son un instrumento más que ayuda a nuestro look, no saben en qué casos usarlas, cómo se ponen o se consiguen, ni cuándo, ni de dónde sale. Hay muchas preguntas alrededor de ellas.
Para empezar, hay que tener en cuenta que las extensiones no se usan solamente para dar la sensación de tener una melena más larga, sino también para provocar efectos de color sin necesidad de teñir el pelo. También para dar mayor volumen o luminosidad. Es una forma ideal de no hacernos nada sobre nuestro propio pelo, por lo que no importa si lo tenemos corto o largo, se trata solamente de renovarnos con otro look.
Con todos estos aspectos, no es difícil pensar que las extensiones de cabello sean unas de las tendencias más importantes para la nueva temporada. Más, si se tiene en cuenta el efecto que tiene en cada una y lo bien que nos pueden hacer lucir ante el espejo y ante los demás.
De dónde proviene el cabello de las extensiones
El cabello de las extensiones no proviene de ningún animal mitológico o sobrenatural, sino que la mayoría de las fábricas que producen este elemento de belleza se encuentran en Asia, alrededor del 80% están ubicadas en ese continente y, por supuesto, lo logran a través de donantes y vendedoras.
Generalmente el cabello de las extensiones se hace con pelo natural, aunque también puede ser sintético en casos particulares, por ejemplo, para postizos, flequillos o una tira de volumen. De hecho, en el caso de las mujeres negras, se utiliza una fibra sintética llamada kanelakon. Lo más importante es siempre asesorarse con una especialista.
A diferencia de nuestro propio pelo, las extensiones de cabello requieren otro tipo de cuidados mucho más especiales. Esto se debe a que no poseen folículos, por lo que su mantenimiento debe ser mucho más exhaustivo que el que se suele aplicar sobre nuestra propia melena.
Lo recomendable a la hora de cuidar las extensiones es usar una mascarilla nutritiva, sérum, protector de calor y champú neutro. Además, hay que desenredarlo cuando está seco, porque si no se puede partir mucho más. Estos cuidados, claramente son el caso de que la idea es que las extensiones de cabello sean fijas. ¿Y tú, has pensado en usar extensiones?