Seguramente ya sepas que las manos son nuestra carta de presentación. Al momento de presentarnos en cualquier tipo de situación, ya sea laboral o social, nuestras manos son un punto importantísimo para dar una buena imagen. Es por ello que tener nuestras uñas sanas, prolijas y fuertes es de suma importancia de cara a las otras personas que nos rodean.
Si de pronto no limamos correctamente nuestras uñas y las cortamos de manera inapropiada lo más seguro es que nos lastimemos y que las mismas crezcan de manera despareja. La lima tiene que ser nuestra gran aliada y el trabajo debe realizarse a conciencia y sin apuros porque si limamos por demás podemos lastimarnos los dedos y deformar la uña.
El desgaste por las labores diarias, así como las roturas y los quiebres acaban por debilitar a las uñas. Estas son las encargadas de cubrir y proteger la punta de los dedos la cual es una zona muy sensible de nuestro cuerpo y debemos cuidarla con cautela. Todas estas condiciones pueden hacer que el estado de tu manicura o de tus uñas no sea el mejor, pero una serie de consejos y trucos pueden ser esenciales para que consigas tus uñas más saludables y largas
Limpia y seca tus manos de manera correcta. Si tienes las uñas largas será conveniente cortarlas un poco antes de empezar, así el limado será más fácil y sencillo. Escoger la lima adecuada es vital. Para uñas naturales, evita las limas de metal y apuesta por un grano alto para conseguir el acabado más liso.
Un punto muy importante es limar las uñas siempre en la misma dirección y evitar hacerlo cuando estén húmedas, ya que están más blandas. Los lados siempre debes limarlos en paralelo. Suavemente redondea los costados de la punta para darles forma oval. Retira cualquier resto que se haya podido quedar en tus uñas (puedes ayudarte de la lima). Para finalizar es importante hidratar tus manos.