Existen muchos métodos para poder mejorar el esmalte dental y retornarle el color blanco y brillante que teníamos cuando éramos más jóvenes. Con el paso de los años, la ingesta de alimentos como café o los malos hábitos como el alcohol o el tabaco, nuestros dientes van perdiendo su color natural y van apareciendo manchas oscuras que empeoran nuestra imagen externa.
Pero esta situación se puede revocar con el uso de algunos remedios naturales como, por ejemplo, el vinagre de manzana, un producto que está elaborado a base de manzanas fermentadas y, por tanto, nos aporta pectinas, enzimas muy saludables y demás minerales que conseguirán mejorar el aspecto de nuestra boca y ayudarán a tener unos dientes blancos y radiantes.
Con el paso de los años, los dientes empiezan a alejarse del color blanco y terminan por tomar un color amarillento. Por ello, las personas acuden a una serie de tratamientos que prevengan las caries, la ausencia de algunos dientes o el mal aliento. Una persona con alguno de los problemas mencionados tal vez no cause la mejor impresión cuando llegue a algún lugar, por lo que seguramente requerirá de tratamientos odontológicos que mejoren este aspecto dental.
Para blanquear los dientes con vinagre sólo necesitas una taza de agua y media cucharada de vinagre de manzana. Mezcla los dos ingredientes respetando la dosis proporcionada. Al resultar tan corrosivo, el vinagre debe consumirse en cantidades muy pequeñas. Una vez que tengas hecha la mezcla debes mojar el cepillo en ella y frotar todas las noches la dentadura con este líquido después de cepillarte los dientes con la pasta dentífrica.
Para no dañar el esmalte sólo debes aplicarlo una vez al día. Tampoco es preciso prolongar este método más allá de los quince días para proteger la salud de la boca. Una vez transcurrido este periodo puedes hacerlo como mucho un par de veces a la semana para que tus dientes no tengan un daño irreparable..