Aunque siempre le prestamos más atención a los dientes. Las encías también representan una parte importante para nuestra salud bucal. Es un tejido que conserva nuestros dientes en su lugar. Si llega tener un inconveniente pude provocar una infección. Te contamos tres secretos para estar sanas.
Entre esos problemas que podemos tener si nuestras encías no están sanas está la gingivitis y la periodontitis. La primera es un dolor más común. Si no te da una solución a tiempo genera problemas mayores. Se produce por una acumulación de bacterias en los alimentos que consumimos.
Esta basura bucal se acumula en la superficie de los dientes e inflama las encías. Si no se limpia en forma correcta con el tiempo puede ser peor. Ahí se transforma en una periodontitis lo que provocaría una pérdida de dientes. Por eso es importante tener unas buenas encías sanas.
La gingivitis no produce dolor pero hay síntomas para darse cuenta. Uno de los principales es el sangrado en el cepillado. Esto aparece por un exceso de placa dental lo que causa que se irrite la encía. Otra señal es las encías rojizas. Las sanas tienen un color rosa pálido. El tercero es el mal aliento.
Los secretos para mantener unas encías sanas son tener una buena higiene oral. Debemos cepillarnos dos o tres veces al día para eliminar bacterias. Además usar el hilo dental habitualmente. Por último una visita al odontólogo para hacer una limpieza cada 10 meses.