Incorporar aceitunas a nuestra dieta es una opción que nos llenará de beneficios. Si aún te resistes al fruto de las plantas de oliva, es hora de que conozcas que tiene gran cantidad de nutrientes que ayudan a nuestra salud. Si, en cambio, eres fanático de las aceitunas, es hora de que sepas lo buenas que son.
El consumo de las aceitunas es muy antiguo, se remite a la antigua Grecia, y han estado en nuestros platos desde hace siglos. Los estudios científicos más recientes ratifican las bondades de este fruto que se destaca por su parte de vitaminas y aminoácidos. Asimismo, contiene minerales como hierro, magnesio, potasio, sodio y fósforo.
Las aceitunas son buenas para para combatir la anemia. Sus altos niveles de hierro colaboran par estabilizar la hemoglobina en sangre. Además, una de sus grandes virtudes son sus lípidos insaturados, con omega-3 y omega-6. Entonces, más allá de que sean ricas en grasas, colaboran en regular el colesterol.
Entre las vitaminas que aportan, destacamos las vitaminas A y C, que ayudan a blindar el sistema inmune. Ahora bien, si quisieras aprovechar todos sus beneficios, el ideal se acerca a consumir entre 5 y 7 aceitunas por día (100 g de aceitunas verdes equivalen a 110 calorías). También, al portar una buna dosis de fibra, ayudan en el proceso digestivo. Otra buena es que generan saciedad, una pequeña porción antes de comer evitará atracones.
Por último, destacamos que el consumo de aceitunas, por contener polifenoles y tiamina, ayudan en la tarea de controlar la ansiedad. Otro gran beneficio es que mejoran nuestra piel. Como estimulan la regeneración de las células dérmicas, suavizan e iluminan la piel. También evitan la aparición de verrugas. Ah, casi nos olvidamos, no nos despediremos sin antes decir que son súper sabrosas y combinan con infinidad de platos.