Cuando el cabello se moja está más expuesto a recibir cualquier tipo de daño. Esto se debe a que las hebras se expanden con el agua y la textura de la toalla y que puede generar una fricción. Así las cutículas del pelo se levantan y se destruyen por lo que no es aconcejable hacerlo.
Así lo explica el portal La Mansión de las Ideas. La mejor recomendación para que no suceda eso es sacar el exceso de agua de manera manual. Se presiona el cabello para arriba para que pueda salir el líquido. De esta forma se produce una buena hidratación y las cutículas se cierran correctamente.
En épocas de mucho frío como el invierno lo más aconsejable es secar el cabello con un secador. Una alternativa es usar un turbante en la cabeza por algunas horas. En este caso es mejor utilizar una camiseta de algodón. También puede ser una toalla de microfibra.
Otros consejos para mantener nuestro cabello saludable es lavarlo con agua fría. Según Hogar Manía sugiere que no es necesario hacer todo el lavado a esa temperatura. Se empieza con una tibia y el enjuague se realiza con la fría. Así el cabello tendrá más brillo.
La última recomendación es no dormir con el cabello mojado, una práctica bastante común en las mujeres con falta de tiempo. De esta manera, se daña la cutícula del cuero cabelludo y así se producen irritaciones que a la larga ocasionan otro tipo de problemas.