El sarro se forma por acumulación de carbonato de calcio, un compuesto sólido y blancuzco que puede tornarse muy difícil de limpiar. Tanques de agua caliente, cañerías viejas, sistemas de calefacción central, pavas, termos y distintos elementos de cocina se pueden ver afectados por esta acumulación de diversas sales.
Es necesario quitar el sarro de la vajilla para asegurarnos una limpieza profunda y además para evitar diversas enfermedades que el compuesto puede traer aparejadas, por eso en esta nota te brindamos algunos consejos que te serán de suma utilidad para limpiar aquellos lugares que parecen imposibles y dejarlos como nuevos.
Para quitar el sarro de los lugares más inaccesibles, lo mejor es realizar higienización con productos que de seguro se encuentran en tu casa. Manos a la obra entonces, a buscar vinagre, bicarbonato de sodio y limón, elementos que van a ayudarte para que puedas terminar con la molestia del sarro en tu vajilla.
El bicarbonato de sodio combinado con vinagre es enemigo por naturaleza del sarro, para preparar la solución hay que colocar dos centímetros de vinagre y una cucharada de bicarbonato en un bowl, luego con un cepillo embebido en este preparado, se procederá a limpiar las superficies que presenten suciedad.
Por su parte, el limón, es muy efectivo a la hora de quitar manchas de sarro, además elimina los olores y es un excelente desinfectante. Para una mejor limpieza te recomendamos hervir una taza de agua con 3 limones y colocar la mezcla en un bowl, luego pasar la preparación por todos los lugares que presenten manchas y los resultados quedarán a la vista.