Uno de los momentos más detestados a la hora de realizarnos la manicura es cuando retiramos el producto y vemos que nuestras uñas han quedado amarillas. Esto se debe a que muchos esmaltes de uñas poseen compuestos químicos para dar el color o la resistencia a esta pintura, uno de estos compuestos es el formol.
Es por eso que hoy te enseñaremos un truco que te ayudará a evitar que tus uñas queden amarillas después de usar esmalte. El truco consiste en aplicar sobre la uña limpia una capa de ‘base coat’. Hacemos hincapié en que debe ser ‘base coat’ y no otro producto porque por ejemplo si aplicas ‘laca de uñas’ no solucionarás el problema de las uñas amarillas, solo estarás tapando el problema provisoriamente.
Los esmaltes ‘base coat’ son un protector, y su funcionamiento es sencillo. Al aplicar una capa protectora sobre la uña evitamos que se la misma se manche por el pigmento que poseen las lacas de uñas de color. De esta forma evitaremos que los compuestos químicos hagan contacto directo con la uña y que posteriormente la manchen.
Además, el esmalte ‘base coat’ también hará que el esmalte de color que apliquemos arriba aguante mucho más tiempo, ya que permite que este se adhiera mejor a la uña y se mantenga impecable. Incluso algunos ‘base coat’ vienen con color, como por ejemplo el rosado, el crudo o incluso algunos vienen con glitter.
En caso de que sea ya demasiado tarde, y tus uñas ya están amarillas, lo primero que debemos hacer tomarnos un descanso de los esmaltes, para que nuestro propio cuerpo intente eliminar esos residuos de manera natural, ya que tanto tratamiento puede llegar a ser agresivo para nuestras uñas. Por otro lado, también podemos utilizar una base blanqueadora, cuya función es corregir las uñas amarillentas y devolverles el color natural.