Las cejas ganaron terreno a la hora de hablar de belleza y cada vez se presta más atención en las últimas tendencias para usarlas más naturales. Por eso ahora está el auge de una técnica denominada microblanding para obtener más pelos en esos lugares donde nos falta. Aunque a veces necesitamos todo lo contrario y la depilación es la mejor opción.
Pero antes de empezar con una depilación debemos tener en cuenta algunos datos de nuestras cejas. De esta manera tenemos que analizar nuestros folículos pilosos. Así se llama a una estructura en forma de saco donde nace nuestro pelo. Tienen diferentes fases de desarrollo y hay que prestar atención principalmente a su etapa de crecimiento.
Las cejas tienen tres fases de crecimiento que se dividen en crecimiento, maduración y caída. Según los expertos mientras más extensa sea la etapa de crecimiento, el cabello será más largo. Habitualmente su longitud no suele ser mayor a 2 centímetros. Los pelos tardan en crecer un mes aproximadamente y por eso hay que alargar lo más posibles su fase de crecimiento.
Las cejas crecen de diferente forma según el método utilizado para sacarlas. No es lo mismo si el pelo se eliminó desde la raíz o fue rasurado. En este tema también pueden variar según el tipo de genética de cada persona. Por lo visto el tiempo de crecimiento de las cejas es muy corto si lo comparamos con nuestro cabello y crece 0,16 centímetros por día.
En el caso de haber rasurados las cejas, el pelo crecerá mucho más rápido que haberlo hecho desde la raíz. En un mes o mes y medio está previsto que las cejas vuelven a tener su largo habitual ya que el crecimiento del folículo se interrumpió y no se eliminó. En el otro caso si usamos una pinza o cera, la regeneración tardará mucho más tiempo y se calcula entre 4 a 6 meses.