Muchas mujeres sueñan con tener pestañas tupidas, largas y onduladas, pero no todas nacieron con la suerte de poseerlas, por lo que es común que acudan al enchinador u ondulador o al rímel. Sin embargo, no es bueno abusar de estos elementos, por lo que es necesario saber que se puede lograr lo mismo sin necesidad de ellos.
Lucir una mirada increíble es algo que a todas las mujeres nos gusta, pero cuando usamos muchos el enchinador o el rímel, a la larga lo que terminaremos provocando es hacerles daño a nuestras pestañas. O sea, al principio tendremos una mirada irresistible, pero al mismo tiempo estaremos debilitando a nuestras pestañas y causando que sean cada vez menos resistentes. Esto se puede evitar con algunos trucos caseros.
Estos trucos no son conocidos por muchas mujeres, e incluso muchas los saben pero no les dan la importancia que realmente tienen y que sirven para cuidar nuestras pestañas del modo correcto, lo que permitirá que poseamos una mirada seductora y poderosa y que dure mucho tiempo.
Trucos para tener pestañas tupidas sin rímel
Para poder lograr tener pestañas tupidas y sofisticadas sin rímel hay que seguir ciertos trucos muy fáciles de lograr y para los que se requiere un mínimo esfuerzo. Si lo haces, podrás tener las pestañas fuertes y una mirada realmente asombrosa. Estos son los mandamientos que debes respetar.
- El primer truco es no enchinar u ondular las pestañas todos los días. Así lo único que haremos es maltratarlas y llegado un día, no podremos hacerlo más. El secreto es solamente hacerlo los fines de semana y dejarlas descansar el resto de los días.
- El segundo truco tiene que ver con las personas que sufren la caída de sus pestañas. Para evitar que esto suceda se puede aplicar suero Flash. Esto tiene una triple ventaja: no dejara que las pestañas se caigan y ayuda a que crezcan largas y hermosas.
- Por último, pero tan importante como los otros trucos. Antes de acostarse, siempre hay que desmaquillar las pestañas y evitar frotarlas con fuerza o tirar de ellas. Las pestañas son frágiles y no queremos hacerles ningún tipo de daño.