El origen de los párpados caídos puede tener muchas causas. Desde cuestiones de salud hasta envejecimiento. A veces pueden ser los dos o uno de ellos los afectados. Lo cierto es que esta situación molesta mucho a las que personas que lo padecen porque les afecta su visión normal al no poder abrir bien sus ojos.
Este problema, que puede solucionarse con cirugías o trucos caseros, excede solamente la cuestión estética. Sus causas pueden ser un exceso de piel del párpado superior, un músculo débil que no logra elevarlo bien, un daño en los nervios del músculo, envejecimiento, una cuestión hereditaria o la consecuencia de una afección o enfermedad.
Lo cierto es que hay formas de revertir esta situación. Una de ellas es mediante la cirugía. En esta lo que se hace es reparar los párpados caídos y se elimina el exceso de piel, músculo y grasa. Esta se puede hacer como una cuestión estética o de salud, según lo que el médico defina.
Pero en muchos casos no hace falta recurrir a una cirugía para solucionar el tema de párpados caídos, ya que también hay algunos trucos caseros que son muy simples de hacer y que ayudan de una manera importante a las personas que pasan por este flagelo.
Trucos caseros para los párpados caídos
Una de las soluciones para los párpados caídos tiene que ver con realizar masajes con una crema hidratante o aceite facial. Estos deben hacerse suavemente, intentando evitar que la crema ingrese en los ojos. Para hacerlo, se deben seguir los siguientes pasos:
- Los pulgares de cada mano ubicarlos en la parte inferior de la cuenca del ojo
- Deslizarlos, siempre siguiendo la forma de las cejas y cuenca
- Mover los pulgares hacia arriba y dejar la tensión en lo alto por tres segundos
- Finalmente, repetir este proceso sisee veces, durante tres días a la semana.
En tanto, hay otro truco casero cuya misión es retrasar la pérdida de firmeza de los párpados. Para llevarlo adelante necesitamos dos ingredientes muy fáciles de encontrar en cualquier hogar y muy simple de realizarlo. Solamente debemos tener a mano una manzana y un poco de miel.
Lo primero que hay que hacer, para cumplir con el segundo de los trucos caseros, es cortar la manzana en varios pedazos y hacer un puré con ellos. Para esto se puede usar una licuadora. Una vez que lo tengamos, hay que agregar dos cucharadas de miel y mezclar. Cuando esté hecho, se realiza una mascarilla con la mezcla sobre la zona de los párpados y se deja actuar por 30 minutos y finalmente se enjuaga con agua fría. Para comenzar a ver los resultados, este proceso se debe repetir unas tres veces a la semana.