El envejecimiento es un proceso natural que todos experimentamos a lo largo de la vida. Pero, si bien no podemos detener por completo el paso del tiempo, podemos influir en cómo envejece nuestra piel. Los dermatólogos y expertos en cuidado de la piel como Nathalie Quiroz Valencia, de Asocolderma, coinciden en que la nutrición juega un papel fundamental en la prevención. Te presentamos tres alimentos que pueden ayudarte a mantener una piel más joven y saludable.
Pescado graso
En particular el salmón, es rico en ácidos grasos omega-3, como el ácido eicosapentaenoico (EPA) y el ácido docosahexaenoico (DHA). Tienen propiedades antiinflamatorias y antioxidantes que pueden ayudar a reducir la inflamación de la piel y combatir los efectos negativos de los radicales libres, que contribuyen al envejecimiento prematuro. Además, pueden fortalecer la barrera cutánea, manteniendo la piel hidratada y reduciendo la sequedad.
Aguacates
Son una excelente fuente de grasas saludables, como los ácidos grasos monoinsaturados, que son beneficiosos para la salud de la piel. Ayudan a mantener la piel suave y flexible, reduciendo la aparición de arrugas y líneas finas.
Además, los aguacates contienen vitamina E, un antioxidante que protege la piel de los daños causados por la radiación ultravioleta, uno de los principales factores del envejecimiento prematuro. La vitamina C también estimula la producción de colágeno, lo que mejora la firmeza de la piel.
Frutas y verduras
Las bayas, como las fresas, arándanos y frambuesas, son ricas en antioxidantes, como las antocianinas y la vitamina C. Los antioxidantes combaten los radicales libres y ayudan a proteger las células de la piel de los daños causados por el sol y otros factores ambientales.
Además, estimulan la producción de colágeno, lo que da como resultado una piel más firme y elástica. Las espinacas, por su parte, son una excelente fuente de vitamina A, que contribuye a la renovación celular y promueve la salud de la piel.