En esta época es habitual que no agarre esos ataques de tos ya que otoño e invierno son las estaciones que las personas están más propensas a los resfriados, gripes y otras enfermedades pulmonares. La tos es la mejor protección que tenemos ya que ayuda a despedir secreciones que nos pueden afectar los bronquios y la tráquea.
También es una importante herramienta para despegar la garganta de grandes trozos de comida que se pueden quedar atascados. Por eso la tos es un síntoma de que nuestro cuerpo se está defendiendo de las diferentes bacterias que hay en el ambiente. Pero cuando se produce en horario de la noche puede ser una complicación a la hora del descanso.
Habitualmente, la tos es más intensa cuando estamos durmiendo y hasta se piensa que empeoró el cuadro que teníamos durante el día. Ante consulta con los especialistas encontramos una explicación racional a este fenómeno.
Julio Maset es uno de los médicos especialistas en este tipo de enfermedades en Cinfa y nos sacó la duda de la tos más intensa durante la noche. “La posición horizontal que adoptamos cuando dormimos lleva a que las vías aéreas superiores, como la faringe, se estrechen, y a que la secreción se acumule en el fondo de la garganta”, comentó.
¿Cómo solucionar la tos por la noche?
“En cualquier caso, este síntoma dificulta un descanso nocturno reparador, lo que puede mermar la capacidad de recuperación natural del organismo, especialmente cuando la tos es consecuencia de una enfermedad. Por tanto, la falta de un sueño reparador puede agravar, empeorar o cronificar esa dolencia”, agregó Julio Maset.
La solución para este tipo de afecciones está relacionada con la humedad de la habitación. “Las medidas como evitar la calefacción elevada y usar un humidificador en el dormitorio pueden contribuir a que la tos nocturna sea menos intensa”, contó el especialista.