El tiempo de esconder las canas a toda costa y fingir que no existen ya pasó. Ahora, les sacamos partido y, en lugar de elegir la esclavitud del tinte, que obliga a visitar casi cada mes la peluquería, las mujeres que ven aparecer sus primeras canas las integran en su melena natural. ¿Cómo? Con coloraciones en tendencia como las mechas espiga. ¿Aún no las conoces?
Esta coloración se conoce como mechas espiga o "herringbone highlights" a un tipo de mecha que se hace con color para disimular las canas. Consiste en que superponer diferentes tonos de forma escalonada para un resultado más natural y difuminado que integre los cabellos grises.
Para tapar las canas de sin la necesidad de teñir todo el cabello, las mechas se aplican con un patrón con forma de espiga mediante finas secciones de cabello que permiten crear matices entre los que se disimulan muy bien el pelo blanco ya que los reflejos rubios hacen que pasen desapercibido.
La coloración para ese pelo blanco se escoge es similar o un par de tonos más claro que el de la base de la melena. Por eso integran muy bien las canas en la melena y permiten un acabado muy natural. El objetivo es crear un color personalizado en cada caso que evite el mantenimiento exigente del tradicional tinte.
¿Qué estropea más el tinte o las mechas?
Para tapar canas de una forma efectiva la mecha tipo espiga se hace con coloración y no con decoloración, aunque siempre se podrían mezclar mechas más claras con otras del tono de la base para darle un acabado más natural. En definitiva, puedes decirle adiós a las mechas balayage y probar esta nueva técnica.