Una manicura nude es la opción ideal para cualquier ocasión, ya que puede ser la elegida para lucir todos los días (ya que combina con cualquier color o estampado de ropa), e incluso también se puede usar en un evento, ya que permitirá que brille el vestido o la prenda que estemos luciendo.
¿Cómo lograr una manicura nude impecable?
El primer paso para lograr una manicura nude impecable siempre consiste en preparar correctamente la uña. Para ello te aconsejamos exfoliar bien la mano y las uñas para remover suciedad y piel muerta. También tienes que aplicar alguna crema o sérum para remover o empujar la cutícula hacia atrás. Esto te ayudará a que la uña luzca más limpia.
También tendrás que cortar y limar tus uñas para que todas queden prolijas. En este paso es cuando debes darle la forma que más te guste a tu uña: cortas, rectas, largas, almendradas, stiletto, etc. Luego retira cualquier resto de esmalte previo con un poco de quitaesmalte o removedor de esmalte.
El próximo paso será aplicar una mano de esmalte base coat. Esto te ayudará a que la uña quede prolija, y además le ayudará al esmalte nude a que quede más prolijo. Una vez que el esmalte base coat esté seco, aplica dos capas bien finas de esmalte nude en todas las uñas.
El último paso será aplicar esmalte top coat en las uñas. Este paso es muy importante, ya que le dará a tu manicura un brillo especial, y además tu manicura se verá protegida por mucho más tiempo. Finaliza tu manicura con aceite para tus cutículas y con una buena crema hidratante para manos.