La aplicación excesiva de productos de maquillaje pueden causar muchos problemas en la piel, desde alergia, acné, e incluso también puedes sufrir lo que se conoce como 'Skin Flood' (también conocida como "inundación"), lo cual se traduce como exceso de brillo, granos y enrojecimiento.
La inundación o 'Skin Flood' se refiere a ciertas condiciones que parecen saturar la salud de la piel. La precaución con las dosis de los activos cosméticos y el conocimiento de las fórmulas suministradas al rostro son puntos indispensables para minimizar el riesgo de pieles inundadas.
La 'Skin Flood' surge por una sobreexposición a principios activos contenidos en los productos que empleas para el cuidado facial. Por lo general puede ocurrir cuando se usa por primera vez un cosmético, un maquillaje. Los síntomas son el enrojecimiento, la descamación, el acné o un notable aspecto grasoso en la cara.
Básicamente la 'Skin Flood' se reduce en: reacciones del tipo dermatitis por cosméticos, por usarlos en exceso; y la producción elevada de sebo, la cual surge por el uso inadecuado de productos que no coinciden con el tipo de piel que tienes. Ante esto, lo que se recomienda es dejar de usar los productos que estas usando, por lo menos por 2 semanas.
¿Cómo evitar la 'Skin Flood'?
Lo primero es realizar una consulta con un dermatólogo. El dermatólogo precisa si hay que regular las dosis o si lo pertinente es sustituir. En todo caso, es imprescindible conocer el tipo de piel para saber qué formulación simpatiza con ella. Utiliza mascarillas antioxidantes con ingredientes como árbol de té, manzanilla, centella asiática, etc. Estas mascarillas hidratarán tu piel y retirarán todos los restos de aquellos productos que causaron la 'Skin Flood'.