Cada vez es más normal que al terminar una temporada, cambiemos de lugar toda la ropa para darle paso a las prendas que comenzaremos a usar. Por ejemplo, ahora muchas personas están dejando en bolsas o en maletas la ropa de invierno, para dejar a mano las prendas de verano.
Sin embargo, si no lavamos y guardamos bien las prendas de invierno, cuando empiecen a bajar nuevamente las temperaturas, no las podremos usar. Es por ello que te enseñaremos un paso a paso que nunca falla a la hroa de realizar correctamente lo que se conoce como cambio de armario.
¿Cómo realizar el cambio de armario?
El primer paso es vaciar por completo el armario. De esta forma podrás tener a mano toda tu ropa y así también podrás dividirla en grupos: lo que usas en verano, lo que usas en invierno, lo que se considera como de media estación, etc. Además de esta forma podrás tener noción de cuánta ropa tienes y encontrar aquellas prendas que dabas por perdida o que no recordabas que tenías. Incluso el hecho de vaciar el armario te ayudará a limpiarlo.
Desecha aquella ropa que esta vieja o rota. Empieza siempre por las prendas que están desgastadas, rotas (o que ya no te guste) y que no tienen posibilidad de reparación. Claramente, si una prenda no tiene arreglo es mejor que la retires de tu armario y de tu casa. De esta forma le darás espacio a prendas de la nueva colección. La ropa que no te guste, puedes donarla.
Una vez que hayas hecho todo esto, podrás guardar las prendas que usarás en la próxima temporada. Primero lava las prendas, plánchalas y guárdalas en bolsas, cajas o maletas. Lo importante es que no se ensucien, que no agarren olor a humedad o que se la coman las polillas.
Finalmente ordena la ropa que usarás esta temporada, para que de esa forma, cuando abras el armario, tengas todo mas a mano. Al tener más espacio, podrás organizar tu nuevo armario como si fuera de revista. Deja todo bien prolijo, usa separadores, perchas, protege las prendas blancas con alguna bolsa, etc.