Hay técnicas de coloración que se ven perfectas en nuestro cabello. Ya sea que estén siendo utilizadas para cubrir canas o para cambiar nuestro look, lo cierto es que estas técnicas son una gran opción para renovar nuestro aspecto e incluso quitarse algunos años de encima.
Una de las técnicas de coloración más utilizada es la balayage, con la que se pueden conseguir dos tonos de tintes. Y es que este estilo ha tenido varias modificaciones en los últimos años. Desde las tonalidades elegidas hasta cómo teñir los segmentos del cabello que iluminan al resto, esta técnica ha pasado por varios cambios para mantenerse como protagonista.
En esta temporada, para no perder la costumbre, esta técnica de coloración también se ha renovado para tener una versión minimalista y más sutil y que implica el teñido utilizando el balayage. La diferencia radica en que se hace desde la mitad de la cabeza hacia abajo, por lo que la parte superior se mantiene intacta y la iluminación comienza después.
Uno de los puntos a favor de esta técnica de coloración es que el cabello puede llevarse recogido, siendo casi imperceptible el cambio de tonalidad cuando nos observan de frente y luego dar la sorpresa cuando nos soltamos el cabello. Este color dos en uno tiene también otro secreto, y es que el color de la melena cambia según el peinado, lo que nos permite una renovación constante.
Otra de las ventajas que posee esta técnica de coloración es que hace que el cabello se vea muy natural. No obstante, una recomendación importante que hacen los especialistas es que los colores elegidos no pasen más de tres tonos por debajo del color natural de la persona, porque en ese caso no se verá natural y de ese modo habrá perdido una de sus principales características.