¿Quieres tener un cabello liso, suave y brillante sin recurrir a productos químicos o costosos? Te tenemos la solución: una keratina casera hecha con dos ingredientes de tu cocina y dos tipos de aceite. Sigue leyendo y descubre cómo prepararla y aplicarla en tu melena.
¿Qué necesitas para hacer la keratina casera?
Para hacer esta keratina casera solo necesitas cuatro ingredientes que seguramente tienes en tu despensa: arroz, maizena, aceite de coco y aceite de oliva. Estos ingredientes tienen propiedades beneficiosas para el cabello, como hidratarlo, nutrirlo, fortalecerlo y alisarlo.
El arroz es rico en aminoácidos, vitaminas y minerales que ayudan a reparar el cabello dañado y a protegerlo de las agresiones externas. La maizena es un almidón que actúa como un alisador natural, ya que cubre la cutícula del cabello y lo deja más liso y manejable. El aceite de coco es un hidratante natural que penetra en el cabello y lo nutre desde adentro, además de darle brillo y suavidad. El aceite de oliva es un antioxidante natural que previene el envejecimiento del cabello y lo mantiene sano y fuerte. Con estos cuatro ingredientes puedes preparar tu keratina casera en simples pasos.
¿Cómo se prepara la keratina casera?
Para preparar la keratina casera solo tienes que seguir estos pasos:
En una olla con agua, pon a hervir una taza de arroz hasta que esté cocido. Cuela el arroz y reserva el agua. En un recipiente, mezcla dos cucharadas de maizena con un poco de agua fría hasta que se forme una pasta sin grumos. Añade al recipiente media taza del agua de arroz y mezcla bien. Agrega una cucharada de aceite de coco y una cucharada de aceite de oliva y vuelve a mezclar hasta que se integren todos los ingredientes. Ya tienes lista tu keratina casera. Puedes guardarla en un frasco o en un envase con atomizador para facilitar su aplicación.
¿Cada cuánto se puede aplicar la keratina casera?
La keratina casera es un tratamiento natural y seguro que puedes aplicar en tu cabello cada vez que lo necesites o lo desees. Sin embargo, te recomendamos que no lo hagas más de una vez por semana, para evitar sobrecargar tu cabello con demasiada humedad o proteína. Lo ideal es que observes cómo reacciona tu cabello al tratamiento y ajustes la frecuencia según tus necesidades.
Como ves, la keratina casera es una forma fácil, económica y natural de alisar tu cabello sin dañarlo ni gastar dinero. Pruébala y verás cómo tu melena se transforma en una cabellera lisa, suave y brillante. ¡Te encantará el resultado!