Es más que normal que en algún momento de la semana notemos que a nuestras manos les falta un poquito más de amor, y ni hablar de las cutículas. Mantener las manos y las cutículas sanas ya no solo es una cuestión de estética, sino de bienestar. De hecho, si quitas y recortas en exceso tus cutículas, lo estás haciendo mal.
Es por ello que en el siguiente artículo te brindaremos algunos consejos para que aprendas a cuidar tus manos y tus cutículas, y que de esta forma puedas lucir una manicura perfecta. Para dejarlo bien claro desde el principio, las cutículas son el escudo protector de la uña.
Las cutículas son la capa de piel que rodea las uñas en su unión con los dedos. Su función es proteger la matriz, la base, la parte más importante de la uña, e impidiendo que la humedad o las bacterias puedan penetrar en ella. Es por ello que no está correcto que las recortes.
Si quieres que tus uñas crezcan fuertes y sanas, todo comienza desde la cutícula. Lo mejor es exfoliar la zona, tanto manos y cutículas, y luego remover con un palito de naranjo aquella piel que se salga con mayor facilidad. Luego deberás aplicar una buena crema hidratante.
Incluso se recomienda aplicar protector solar en las manos, ya que (sobretodo en el verano) la piel de las manos suele secarse mucho más ante la exposición del sol. Te recomendamos cremas con vitamina E, o con aceites como el de almendras, coco y jojoba. También puedes usar productos con biotina, vitamina B8, etc. Todo esto estimula la regeneración de la piel y la producción de queratina.