La retención de líquidos, también conocida como edema, es una condición en la que el cuerpo acumula un exceso de líquido en los tejidos. Este es un problema que aqueja habitualmente a una gran cantidad de personas. Existen varias causas posibles y algunas tienen que ver con el sistema circulatorio, como insuficiencia cardíaca o venas varicosas, que pueden dificultar el retorno adecuado de los líquidos al corazón.
Además, hay otros factores que pueden provocar la retención de líquidos como una dieta alta en sodio, el sedentarismo, el embarazo, los cambios hormonales, la obesidad, la mala circulación, lesiones o infecciones. Los síntomas más comunes son hinchazón y sensación de pesadez en tobillos, piernas y manos.
El tratamiento de la retención de líquidos depende de diferentes causas. En algunos casos, hacer cambios en la dieta, reducir el consumo de sodio, aumentar la actividad física y elevar las piernas pueden ayudar a reducir esta problemática. En situaciones más graves, pueden ser necesarios medicamentos diuréticos recetados por un médico.
Remedio casero ideal
Una de las formas para evitar la retención de líquidos es utilizar un ingrediente infaltable de tu cocina. Estamos hablando del orégano que tiene diferentes beneficiosos medicinales y es ideal para estas ocasiones ya que tiene propiedades antibacterianas y fungicidas. Es perfecto para combatir la hinchazón en tus pies.
Solo debemos incluir 5 cucharadas de orégano molido o en hojas en una olla a fuego moderado con un litro de agua. Dejamos hervir por tres minutos y luego dejamos descansar hasta que esté totalmente frío. Separamos las hojas con un colador y agregamos al líquido una taza de vinagre blanco y removemos hasta que se haga una mezcla integrada. Así obtenemos un remedio casero para tratar la hinchazón. Por último, coloca tus pies con un poco de bicarbonato de sodio alrededor de tus pies y uñas entre 5 y 10 minutos.