Con la llegada del verano y las vacaciones es el momento ideal para pasar unos días en la playa. Acá las caracolas de mar son objetos preciados que encontramos en las orillas y tenemos la tentación de llevarlos como adornos para nuestra casa. Pero no puede ser una buena idea si seguimos los lineamientos del Feng Shui.
Según esta cultura milenaria todos los objetos tienen una determinada energía y la ubicación en tu casa cumple un papel importante. Depende del lugar donde lo pongamos poder ser un buen signo para promover la salud, la prosperidad y el bienestar de las personas que lo habitan. Para el Feng Shui no es una influencia positiva tener las caracolas de mar en tu espacio hogareño.
Este tipo de objetos de mar representan la naturaleza muerta y no es una energía positiva para tu casa. También son animales no muy rápidos lo que provoca que haya un estancamiento para nuevos proyectos personales. Entonces este adorno que es muy común traernos de nuestras vacaciones no puede ocasionar más de un dolor de cabeza según indica el Feng Shui.
Las malas vibras de las caracolas de mar
En realidad, las malas vibras están relacionados con cualquier animal de naturaleza muerta y no solamente con las caracolas de mar. Aunque puede ser algo decorativo al final de cuentas puede ocasionar problemas con la limpieza y el orden equilibrado que debe tener tu hogar. Otros ejemplos pueden ser los insectos disecados o pieles de animales ya que se asocian con algo oscuro como la muerte de un ser vivo.
El Feng Shui considera la disposición de los objetos, el diseño arquitectónico, los colores, la iluminación y otros elementos para facilitar un flujo armonioso de energía en un espacio. Se evitan los bloqueos y se fomenta que la energía pueda fluir libremente por diferentes lugares de tu hogar. Por eso las caracolas de mar no cumplen con esos requisitos.