¿Has pensado en alisar tu cabello y cambiar totalmente de aspecto? Este es un pensamiento por el que hemos pasado muchas mujeres a lo largo de la vida, una y otra vez. Y hay que confesarlo, lo hemos hecho más de una vez en muchos casos. El problema en realidad es el cómo lo hacemos.
La opción más segura para alisar el cabello es siempre el salón de belleza con un profesional. Por supuesto, esto puede implicar una suma de dinero importante. También podemos usar algunas herramientas de calor, pero un simple cambio de look se puede convertir en una pesadilla cuando terminemos arruinando nuestro cabello y necesitemos repararlo tras haberlo quemado.
Pero hay una tercera opción y es la de crear nuestra propia keratina casera. De esa manera, serán varios los beneficios que obtendremos: podremos alisar el cabello, fortalecerlo, dejarlo suave y brillante y, al mismo tiempo, evitar los riesgos de dañarlo y no habremos gastado mucho dinero, salvo para los ingredientes.
Para esta receta de alisar el cabello solamente vamos a necesitar de tres cucharadas de harina de maíz, media taza de aceite de coco, el zumo de un limón y media taza de aceite de oliva. Lo primero que haremos será poner a hervir los aceites a fuego lento y luego mezclar el zumo de limón con la harina de maíz. Cuando los aceites hayan hervido, se mezclan todos los ingredientes y se revuelven por 10 minutos.
Una vez que haya pasado el tiempo, se retira la mezcla del juego, se separa el exceso de aceite y se deja enfriar para después aplicar sobre el cabello seco en su totalidad. Hay que dejar que actúe por dos horas y luego retirar con agua tibia para finalmente dejar secar de modo natural. Los resultados serán inmediatos al peinar el cabello.