Todo el tiempo están surgiendo diversas técnicas o trucos para poder conseguir un cabello limpio e impecable en cada lavado. Al momento de lavarse el cabello, lo mejor es pensar en el tipo de pelo que tenemos: si es fino o grueso, si es lacio o con rulos, etc. Sin embargo existe una teoría que asegura que sin importar el pelo que tengas, lo mejor es lavarlo con la cabeza hacia abajo.
¿Por qué hay que lavarse el cabello con la cabeza hacia abajo?
Este tip o truco asegura que de esta forma evitamos que el cabello se pegue al cuero cabelludo. Por lo tanto este truco es indicado para quienes tienen poco pelo o demasiado finito. Este truco lo puedes hacer en el lavatorio, en la ducha o en una canilla que esté a tu altura.
La justificación de este truco es que la acción misma del agua de la ducha al caer tiende a producir un aplastamiento de la fibra capilar y, si le sumamos la temperatura del agua, para este tipo de pelo delicado, no sería la mejor opción si lo que buscamos es que no pierda el poco volumen que tiene.
Por lo tanto, si lavamos el cabello cabeza abajo, estimulamos el flujo sanguíneo a la zona, lo que fomenta la estimulación del cuero cabelludo y, por ende, la vitalidad del pelo. También se recomienda usar agua que no esté muy caliente, ya que sino eliminarás el brillo natural del pelo y el mismo quedará deshidratado.
Como truco final te aconsejamos realizar un enjuague final con agua fría para cerrar las cutículas, lo que le aportará un máximo de brillo. Sin dudas son trucos fáciles, rápidos y sencillos que no te tomarán mucho tiempo en llevarlos a cabo. Son válidos tanto para invierno como para verano.