En los últimos años se ha puesto de moda llevar todo el cabello teñido con colores fantasía. Sin embargo también es válido hacerse algunas mechas de color o teñir toda la parte baja de la melena. Pero, para que el color fantasía luzca vibrante y llamativo, hay que cuidaro correctamente, sino el mismo se irá lavando.
¿Cómo cuidar el cabello teñido con colores fantasía?
Es importante destacar que la mayoría de estos tintes color fantasía los encontramos de manera semipermanente, ya que se van desvaneciendo a lo largo de los lavados. Lo mejor es aplicar los mismos, preferentemente, sobre pelo muy claro o decolorado para que se noten realmente. Si los aplicas directamente sobre cabellos oscuros pueden ocurrir dos cosas: o que el color no se note, o que consigas una versión más oscura del color elegido.
La tendencia de los cabellos de colores surgió hace muchos años y gracias a estrellas de la música como Cindy Lauper o Madonna. Esta moda luego se fue modificando. En los años 90, por ejemplo, se usaban las mechas de colores, pero no todo el cabello teñido. En los últimos años, la cantante Billie Eilish se animó a teñir todo su cabello de color verde fluor, mientras que la colombiana Karol G se animó a colores como el azul, el rosado o el rojo.
Los cuidados capilares después de utilizar estos tonos deben ser constantes. Sobre todo, a partir de productos para conservar el color, parea que no se vaya apagando. El cabello debe estar siempre hidratado, ya que el cabello seco se decolora más rápido. Por ello, las mascarillas y los sérums deben ser tus principales aliados.
Además, existe un producto llamado crema ácida, el cual se encarga de mantener los colores de la tintura brillantes y vibrantes. SIn embargo debes tener en cuenta que los colores fantasía suelen durar entre 3 a 20 lavados, no se puede hacer más magia. Cada 20 lavados deberás aplicar nuevamente el color.
Por último vale aclarar que cuanto más claro sea tu pelo, mejor se lucirá el color elegido. Gracias a su pH ácido y fórmula libre de amoníaco y peróxido, restaura las fibras dañadas, sella la cutícula, prolongando la durabilidad del tono y brindando brillo extremo.