La creencia milenaria del Feng Shui puede ayudarnos a encontrar la armonía y el balance que necesitamos en nuestras vidas. Esta práctica asiática puede también mezclarse o combinarse con otras creencias y así potenciar sus objetivos. Por ejemplo, el Feng Shui puede relacionarse con el amuleto del ojo turco.
¿Qué es el ojo turco?
Un nazar, piedra del mal de ojo, ojo turco u ojo griego es un amuleto que está destinado a proteger contra el mal de ojo. Es más común en Turquía. Se puede encontrar casi siempre presente en las oficinas y hogares, en joyería, para los bebés, en los vehículos, puertas, caballos e incluso teléfonos celulares.
¿Dónde hay que colocar el ojo turco para proteger el hogar, según el Feng Shui?
Se cree que el ojo turco o nazar se piensa que atrae la buena suerte y repele la mala energía, y se utiliza comúnmente como un símbolo de protección. En general, el nazar es un símbolo muy importante y valorado en la cultura turca, y se usa comúnmente para protegerse contra el mal de ojo y atraer la buena suerte y la protección.
El ojo turco es un amuleto de protección contra la envidia y la mala suerte. No solo se los ve en pulseras o collares. También se los usa para decorar diferentes ambientes de la casa, o hasta se utiliza como diseño de uñas. De esta forma, y siguiendo los consejos del Feng Shui, el ojo turco puede colocarse en: la puerta de la casa para la protección del hogar.
De esta forma, lo que se espera es que las malas vibras queden fuera. Pero, en caso de colocar el ojo turco como elemento decorativo interno, el Feng Shui sugiere ponerlo en algún lugar que apunte al exterior, como puede ser una ventana o a la terraza.