Lograr un maquillaje impecable y de aspecto profesional no tiene por qué ser costoso. El mundo de la belleza está lleno de productos económicos que pueden brindarte resultados sorprendentes. Una de estas joyas accesibles es la esponja de Mercadona, que se convirtió en un fenómeno por su eficacia y su precio asequible de tan solo 3 euros. Te mostraremos cómo mejorar tu rutina en solo cinco sencillos pasos utilizando este elemento.
Prepárate
Antes de aplicar tu maquillaje, asegúrate de que tu piel esté limpia e hidratada. Lava tu rostro con un limpiador suave y aplica una crema hidratante adecuada para tu tipo de piel. Esto proporcionará una base uniforme y fresca para tu maquillaje.
Moja la esponja
La esponja funciona mejor cuando está húmeda pero no tiene que estar empapada. Sumérgela en agua tibia y luego exprime el exceso de agua. Esto ayudará a que el maquillaje se mezcle de manera uniforme y se deslice sobre la piel sin problemas.
Aplica la base de maquillaje
Usa la esponja para aplicar tu base de maquillaje. Comienza en el centro del rostro y difumina hacia afuera. La textura suave permite una aplicación sin rayas y un acabado natural. Además, absorberá cualquier exceso de producto, evitando que se vea pesado.
Corrige imperfecciones
Utiliza la punta de la esponja para aplicar corrector en las áreas que lo necesiten, como ojeras, manchas o imperfecciones. La precisión de la esponja facilita la aplicación precisa y la mezcla adecuada del corrector, dejando una apariencia suave y uniforme.
Sella con polvo
Finaliza tu maquillaje aplicando polvo translúcido con la esponja. Esto ayudará a fijar el maquillaje y reducir el brillo no deseado. Asegúrate de aplicarlo de manera uniforme para obtener un acabado mate y duradero.