Una sonrisa brillante y blanca es un atributo deseado por muchas personas, ya que puede aumentar la confianza y la autoestima. Si buscas maneras de blanquear tus dientes de manera casera, aquí te presentamos algunos consejos efectivos que puedes probar:
Bicarbonato de sodio y agua: Mezcla una pequeña cantidad de bicarbonato de sodio con agua para crear una pasta. Cepilla tus dientes con esta pasta suavemente durante uno o dos minutos. El bicarbonato de sodio es un agente abrasivo suave que puede ayudar a eliminar las manchas superficiales de los dientes y dejarlos blancos.
Carbón activado: El carbón activado se ha vuelto popular en la comunidad de cuidado dental casero debido a su capacidad para absorber manchas y toxinas. Puedes cepillarte los dientes con una pequeña cantidad de carbón activado durante unos minutos y luego enjuagarte bien. Ten en cuenta que su uso debe ser ocasional, ya que el carbón puede ser abrasivo.
Aceite de coco para enjuague bucal: El aceite de coco tiene propiedades antimicrobianas y puede ayudar a mantener la salud bucal. El método del enjuague con aceite, conocido como "oil pulling", implica enjuagar tu boca con una cucharadita de aceite de coco durante unos 15-20 minutos antes de cepillarte los dientes. Esto puede ayudar a eliminar las bacterias y mantener tus dientes más limpios.
Fresas y bicarbonato de sodio: Tritura unas fresas y mézclalas con bicarbonato de sodio para crear una pasta natural. Aplica esta mezcla en tus dientes y déjala actuar durante unos minutos antes de enjuagar. Las fresas contienen ácido málico, que puede ayudar a blanquear los dientes.
Consumir alimentos crujientes: Algunos alimentos crujientes como las manzanas, zanahorias y apio pueden actuar como limpiadores naturales de dientes. Comer estos alimentos puede ayudar a eliminar las partículas de alimentos y manchas superficiales de los dientes.