En la búsqueda de un estilo de vida más saludable y el control del peso, a menudo nos enfocamos en los alimentos comunes que debemos consumir o evitar. Pero, en ocasiones, es beneficioso explorar alimentos fuera de lo común que pueden ser aliados sorprendentes en nuestra lucha contra el sobrepeso. Te presentamos tres de ellos.
Algas marinas
Las algas marinas, como el nori, el wakame y el kombu, son ingredientes tradicionales en la cocina asiática que ganaron popularidad en todo el mundo debido a sus beneficios para la salud. Son naturalmente bajas en calorías, pero ricas en nutrientes esenciales como el yodo, el hierro y las vitaminas del complejo B. Además, contienen una fibra llamada algina que puede ayudar a reducir la absorción de grasas en el cuerpo.
Las algas marinas pueden ser incorporadas fácilmente en tu dieta. Puedes usar nori como envoltura para sushi o agregar algas secas a tus ensaladas y sopas. Estos alimentos exóticos no solo son sabrosos sino también una opción inteligente para mantener el sobrepeso a raya.
Insectos comestibles
Aunque la idea de comerlos puede parecer poco convencional, son una fuente sorprendentemente nutritiva de proteínas magras y otros nutrientes esenciales. Los insectos comestibles, como los grillos y las larvas de escarabajo, son bajos en grasas y ricos en proteínas. También son una fuente sostenible de alimento, ya que requieren menos recursos para su producción en comparación con el ganado convencional.
En muchas partes del mundo, son una fuente de proteínas común. Puedes encontrar productos a base de insectos, como barras de proteínas y harina de insectos, en algunas tiendas de alimentos saludables. Al incorporarlos en tu dieta de manera consciente, puedes obtener los beneficios nutricionales sin contribuir al sobrepeso.
Konjac o Glucomanano
Es una planta originaria del sudeste asiático que se utiliza durante siglos en la cocina y la medicina tradicional. Su principal beneficio radica en su alto contenido de fibra soluble, que forma un gel en el estómago y puede ayudar a reducir el apetito y la absorción de grasas.
El konjac se encuentra comúnmente en forma de fideos o harina, y es una excelente adición a una dieta para perder peso. Puedes usarlo como sustituto de la pasta tradicional en platos como la pasta alfredo o las sopas. Además, debido a su bajo contenido calórico, puede ayudarte a sentirte saciado sin añadir calorías extras a tu dieta.