CEBOLLA

Cebolla: descubre el secreto natural para un cabello radiante

Tu cabello quedará como nuevo una vez que pruebes este secreto.

Cebolla.Créditos: Fuente: archivo producción Panorama España
Escrito en ESTILO DE VIDA el

La cebolla es una de las verduras más versátiles que podemos utilizar en la gastronomía, pero lo cierto es que pocas personas saben que también se la puede usar en el mundo de la cosmética, especialmente en productos relacionados con el cuidado capilar, ya que esta planta estimula el crecimiento del cabello, entre otros beneficios.

Es por ello que hoy te hablaremos del champú de cebolla y sus propiedades, y estamos seguros de que al finalizar el artículo irás a corriendo a prepararlo para aplicarlo en tu cabello. La cebolla es una hortaliza rica en vitaminas, minerales y antioxidantes, motivo por el cual se considera un alimento lleno de propiedades beneficiosas para la salud de nuestro organismo.

Cebolla. Fuente: Pexels

La cebolla está compuesta por diversos activos como la quercetina (flavonoide) y diversos compuestos azufrados, los cuales aportan importantes nutrientes para el saludable crecimiento del cabello, a la vez que disminuyen la proliferación de hongos, bacterias y levaduras, responsables de la caída del cabello y la caspa.

La quercetina actúa también como un potente antioxidante y eliminador de radicales libres, que reducen la inflamación y estimulan el riego sanguíneo del cuero cabelludo. En el ser humano, el cabello crece por ciclos, por lo tanto es importante estimular ese crecimiento, y esto podemos lograrlo a través de la cebolla.

Cebolla. Fuente: Pexels

¿Cómo preparar el champú de cebolla?

Ingredientes

  • Un bote de champú de cualquier marca y con aroma intenso de 350 ml.
  • Una cebolla roja mediana.

Para poder preparar este champú de cebolla solo necesitas cortar la cebolla en trozos medianos e introducirlos en el interior del bote de champú. Cierra el bote y agita todo bien para que se mezcle la cebolla con el champú. Deja fermentar la mezcla durante 15 días en un lugar seco, fresco y libre de humedades. Pasado este tiempo, el champú ya está listo para usar.