Si tienes una mascota, sabes lo importante que es para ti. Es tu compañero, tu amigo, tu familia. Por eso, cuando se enferma o sufre, tú también lo sientes. Y quieres hacer todo lo posible para que se recupere y esté bien. Una forma de apoyar a tu mascota es rezar por su salud. Hay una oración muy poderosa que te puede ayudar a pedir por su bienestar.
La oración que te vamos a enseñar es una una forma de agradecerle todo lo que te da, de reconocer su valor y su bondad, de pedirle perdón por tus errores y de ofrecerle tu protección y tu cuidado. A fin de cuentas son tu familia elegida y quizá los seres de los que más amor vas a recibir.
Decir una oración por tu mascota es una forma de confiar en Dios, en su misericordia y en su poder. Es pedirle que bendiga a tu mascota, que le dé fuerza y salud, que le cure y le salve, que le dé paz y alegría. Además al decirla tendrás paz para poder seguir ayudando a tu amigo y mayor tranquilidad.
La oración que te regalamos a continuación es muy sencilla y puedes rezarla en cualquier momento y lugar. Solo necesitas tener a tu mascota cerca o en tu mente, y hablar con Dios como lo harías con un padre amoroso. Puedes usar tus propias palabras o seguir este modelo que te proporcionamos.
Oración por la salud de tu mascota
La oración comienza así: "Señor, te doy gracias por mi mascota, que es un regalo de tu amor. Te alabo por su belleza, su inteligencia, su lealtad y su cariño. Te pido perdón por las veces que no he sido bueno con él, que lo he descuidado o maltratado. Te ofrezco mi vida y mi corazón para cuidarlo y protegerlo. Señor, te pido por la salud de mi mascota, que está enferma o sufriendo. Te ruego que le des tu gracia, tu luz, tu sanación y tu salvación. Te suplico que le quites el dolor, la angustia, el miedo y la tristeza. Te imploro que le des la fuerza, la salud, la paz y la alegría".
"Señor, te entrego a mi mascota, que es parte de mi familia. Te la consagro a ti, que eres su creador y su dueño. Te la confío a ti, que eres su pastor y su amigo. Te la encomiendo a ti, que eres su médico y su salvador. Señor, te agradezco por escuchar mi oración, que es una expresión de mi amor por mi mascota. Te alabo por responder a mi súplica, que es una manifestación de tu amor por mi mascota. Te bendigo por cumplir tu promesa, que es una prueba de tu amor por mi mascota. Amén", finaliza la oración.