La mayoría de las prendas de vestir pueden achicarse o cambiar de color a medida que las vamos lavando. Esto puede causar en nosotros enojo y molestia, pero es por ello que desde Panorama España comenzamos una búsqueda para encontrar el truco perfecto para recuperar el color de tus prendas desteñidas.
Por suerte dimos en la tecla con el truco casero para que esto ocurra, y lo mejor de todo es que conseguimos trucos que se realizan con ingredientes o elementos naturales. Por lo tanto, tus prendas recuperarán sus colores sin la necesidad de usar productos tóxicos o repletos de ingredientes nocivos para las telas.
¿Por qué la ropa pierde su color?
La ropa suele perder su color cuando la lavamos de forma incorrecta, esto quiere decir que lavamos la ropa con agua muy caliente. Por otro lado, si recurrimos a centrifugados fuertes, las fibras de los tejidos acaban rompiéndose y se producen esas bolitas y pelusas tan antiestéticas.
Otra de las causas que hacen que la ropa pierda su color es la sobre exposición al sol de las prendas. Usar detergentes o jabones para la ropa abrasivos también dañan las prendas.
¿Cómo recuperar el color de tus prendas?
Ingredientes
- Té negro, vinagre blanco y sal gruesa.
Prepara una infusión de té negro y déjala reposar por cinco minutos en un barreño con dos tazas de vinagre blanco y cinco cucharadas de sal gruesa. Introduce las prendas desgastadas y déjalas a remojo durante un par de horas.
Cuando hayan pasado un par de horas, retira la prenda descolorida, escurre el exceso de agua y lava la prenda en la lavadora con un ciclo de lavado corto, agua fría y detergente líquido.
A medida que la ropa comience a secarse, comenzarás a notar que la misma ha recuperado su color intenso. Te aconsejamos no utilizar blanqueadores químicos cuando laves prendas de color oscuro. El cloro, la lejía y otros blanqueadores están prohibidos.
Por otro lado, también te recomendamos comenzar a usar vinagre en el lavado de la ropa. El vinagre blanco es un gran aliado para suavizar la ropa de forma natural y para avivar los colores de la prendas.