Pocas personas saben que el cuerpo produce colágeno de manera natural desde que nacemos, pero el paso del tiempo hace que esta producción disminuya notablemente. Esto hace que nuestra piel luzca sin brillo, flácida y hasta que se produzcan manchas, arrugas, etc.
Si bien en cualquier perfumería o farmacia podemos encontrar cremas, sérums y demás productos que contienen colágeno, los mismos suelen contar también con ingredientes químicos. Ni hablar del valor económico que tienen estos productos, el cual es muy elevado. Es por ello que a continuación te enseñaremos a realizar colágeno casero.
¿Cómo preparar colágeno casero?
Ingredientes:
- 2 tazas de huesos de pollo, pescado o carne (preferiblemente de animales criados orgánicamente)
- 4 tazas de agua filtrada
- 2 cucharadas de vinagre de manzana
El primer paso será preparar los huesos. Tienes que lavarlos para poder eliminar restos de sangre y tejido. Luego tendrás que ponerlos a cocinar en una olla grande con agua filtrada. Añade el vinagre de manzana, el cual servirá para extraer los nutrientes del colágeno de los huesos. Deja reposar durante unos 30 minutos a 1 hora.
Cocina todo a fuego lento hasta que llegue a su punto de ebullición. Reduce el fuego y cocina a fuego bajo durante unas 6/8 horas. Esto permitirá que los nutrientes y el colágeno se liberen completamente en el caldo. Si se forma espuma en la superficie de la olla, te aconsejamos retirarla con una cuchara.
¿Cómo se consume este colágeno casero?
Una vez que el caldo esté listo, retira los huesos y cuela todo. Deja que el caldo se enfríe a temperatura ambiente antes de refrigerarlo. Puedes almacenarlo en recipientes herméticos en el refrigerador por hasta una semana. También puedes ponerlo en una cubetera y aplicarlo en el rostro como si fuera un hielo normal.
La idea de este caldo es consumirlo como sopa, pero si le agregas hielo, puedes disfrutar de una deliciosa bebida repleta de nutrientes que ayudarán a que tu piel luzca hermosa.