Para perder peso, sabemos que la fórmula fundamental es alimentación sana y ejercicio. Estos dos hábitos son los que hacen posible la reducción de grasa en el cuerpo (y aun más si es con la guía de un experto). Pero este combo dúo implica mucho tiempo, esfuerzo y constancia y, en caso de que quieras bajar kilos más rápido, no caigas en productos milagro o remedios caseros que podrían poner en riesgo tu salud. En cambio, prueba esta dieta del huevo para perder peso sin pasar hambre.
¿Por qué seguir la dieta del huevo?
La dieta del huevo es un plan de alimentación temporal, lo mejor es que la lleves por un tiempo y luego aprendas a adoptar hábitos sanos. sostenibles a largo plazo para perder peso. Se dice que este tipo de alimentación que se basa en el huevo puede ayudar a adelgazar debido a que acelera el metabolismo hasta un 30%, según reporta "Una dieta rica en proteínas para reducir la grasa corporal: mecanismos y posibles advertencia", artículo del portal especializado National Library of Medicine.
Además, el huevo no solo funciona para perder peso, también es muy versátil para la alimentación diaria. Puedes comerlo en desayunos, comidas y cenas. Es la base y el protagonista de muchos platillos, como los maravillosos omelettes que siempre son un gran alimento de almuerzo. Se puede ingerir de tantas formas, desde en tortilla hasta hervido que sin duda es casi imposible que nos aburra. También están repletos de proteínas, grasas saludables y pocas calorías, lo que lo convierte en un ingrediente fenomenal para bajar de peso.
¿Cómo es la dieta del huevo?
La dieta del huevo para perder peso consiste en crear un plan alimenticio temporal donde se consuma cerca de cuatro huevos por día, junto con otros alimentos recomendamos, así como la restricción de otros tantos. Antes de realizar esta dieta, te recomendamos consultar a tu médico para evitar posibles daños en tu metabolismo y si quieres lograr objetivos más concretos, un profesional de la salud puede ayudarte.
Para perder peso de manera efectiva con la dieta del huevo, se tiene que eliminar algunos alimentos, entre ellos los lácteos (incluyendo los quesos), cereales, verduras con almidón, cereales, fruta en grandes cantidades y bebidas azucaradas, así como las alcohólicas. En cambio, se puede consumir pollo, pavo, atún, salmón, pescado, espinacas (y cualquier verdura de hoja verde) y frutas con baja cantidad de azúcar natural.