Tauro, al igual que todos los signos del zodiaco que componen el horóscopo, es de dar señales cuando gusta de alguien. Si bien, los hombres de este signo son algo indecisos al principio y les cuesta asumir lo que sienten, una vez que lo hacen son capaces de enamorar al primer beso.
Los hombres de Tauro son sensuales por naturaleza. Ellos saben que tienen en su poder algún arma de seducción masiva y si han logrado reconocerla, son un peligro para toda persona que esté cerca de ellos, pero lo malo que tienen es que dan muchas vueltas antes de mostrar que realmente gustan de alguien y, a veces, no todas las personas tienen ganas de esperar a que ellos se decidan.
Si gustas de un hombre de este signo del zodiaco ten en cuenta que ellos, al principio, son tímidos como todo el mundo pero que si gusta de ti, siempre te dedicará algunas miradas diferentes. Tauro tendrá gestos contigo que no tiene con ningún otro y se convertirá en un amigo cercano para ganarse tu confianza.
A su vez, para este miembro del horóscopo, tú te convertirás en una persona que merece su atención urgente. Si a sus amigos demora tres o cuatro horas en responderle un mensaje, contigo no pasarán más de cinco minutos. Al mismo tiempo, siembre buscará estar cerca de ti si hay más personas, porque este signo del zodiaco también quiere ser una especie de guardaespaldas tuyo, aunque la línea que divide el hecho de que te quiera cuidar a que pase a ser posesivo, puede llegar a ser muy fina.
Al estar cerca de ti, este signo del zodiaco buscará algún roce, cualquier contacto físico o encontrarse con tu mirada. Porque Tauro va a entregar muchas señales y no se va a jugar de la nada si siente que no las recibe con la misma intensidad que él las entrega. Y como para la mayoría de los hombres, las señales son complicadas de entender.
De hecho, para Tauro, las señales que él entrega son bastante obvias de que le gustas, aunque realmente entenderlas puede llegar a ser todo un desafío. Al pensar así, le cuesta dar el primer paso y puede demorar más de lo aconsejado, pero cuando lo haga, es capaz de provocar que la otra persona no se quiera separar más de él.