Aunque las relaciones actuales entre Alberto de Mónaco y el Rey Felipe no pasan por su mejor momento, la familia Grimaldi siempre eligió algunos lugares de España para realizar unas visitas extravagantes. Los hijos de Carolina de Mónaco son amantes de las playas de Ibiza y cada verano lo hacen saber en sus redes sociales.
Las diferencias entre las dos casas reales comenzaron cuando Alberto de Mónaco esa miembro del Comité Olímpico y Madrid era una de las candidatas a los Juegos en el 2012. El monarca le bajó el pulgar a la candidatura y no fue visto con buenos ojos en el Palacio de la Zarzuela. Luego no hubo presencia española en la asunción de Alberto y tampoco en la boda con Charlene de Mónaco.
A pesar de todo esto, para la realeza monegasca España siguió siendo su destino predilecto. Hace poco Alberto de Mónaco hizo una visita y solamente tuvo un almuerzo protocolar para luego seguir su agenda. El monarca se dirigió hasta Cantabria para conocer la cueva de El Castillo, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
La visita más rara de Carolina de Mónaco
Carolina de Mónaco visitó varias veces España, pero en una de las últimas fue la más extravagante de todas. Bajo el reinado del Rey Juan Carlos y la Reina Sofía fue invitada a la reinauguración de un Aquarium en San Sebastián. La princesa llegó con un abrigo camel y un bolso de cocodrilo en un momento que las relaciones entre las dos realezas no pasaba por su mejor momento.
Lo más llamativo del evento fue el motivo por el cual se invitó a Carolina de Mónaco en el 2009. En aquel entonces se celebraba que hacía 80 años atrás un tatarabuelo de Alberto I y el Rey Alfonso XIII habían inaugurado el aquarium. La princesa no rechazó la invitación y estuvo en el lugar a pesar de que no tenían buena sintonía.