Camilla Parker Bowles ha tenido una larga historia, llena de controversias y polémicas culpa de su amor por el actual Rey Carlos III. Ambos se conocieron muy jóvenes y por la belleza que ella desplegaba, no es de extrañar que el entonces príncipe se haya sentido atraído hacia ella desde el primer momento.
Antes y después de convertirse en la reina consorte de Carlos III, Camilla Parker Bowles ha tenido que lidiar con la opinión pública más de una vez. El haber sido la amante del entonces príncipe cuando este se encontraba casado con Lady Di no le ha jugado muy a su favor, ni a ella, ni a su familia, que en alguna ocasión declararon que se sintieron muy pocos apreciados por el solo hecho de compartir el apellido de Camilla.
Pero antes de toda esa controversia, Camilla Parker Bowles tenía otra vida en la que nunca se imaginó que un día iba a terminar siendo la Reina consorte. Hija del comandante Bruce Middleton Hope Shand y de Hon Rosalind Maud Shand, ella creció en Soussex Oriental y en South Kensigton. Tuvo su educación en Inglaterra, Suiza y Francia, pero nunca se imaginó al lado de un Rey.
De hecho, en 1973 Camilla Parker Bowles se casó con el oficial del Ejército británico Andrew Parker Bowles y tuvo dos hijos, Tom y Laura. El destino quiso que ambos se divorciaran en 1995. Para la misma época, Lady Di dio su famosa entrevista con Panorama y a fines de ese año, la Reina Isabel II, le insistió a ella y a su hijo Carlos para que se divorciaran, lo que le dio a este y a Camilla vía libre para estar juntos de manera oficial.
Hoy, Camilla Parker Bowles no es la misma que hace 40 años atrás. Igual que a todo el mundo, los años han dejado su marca, pero todavía hay rastros de aquella joven que tan solo con su presencia logró enamorar al Rey Carlos III, sin saber todo el drama que provocaría en la Casa Real, ni que ella un día terminaría siendo la Reina consorte.