Antes de conocer a la reina Isabel II, Meghan Markle tuvo que aprender muchas cosas sobre la vida real. Según la serie documental de Netflix "Harry & Meghan", su esposo le advirtió que su vida cambiaría por completo en el momento en el que su relación se hiciera pública, aunque ella no llegó a creer que fuera en un giro de 180 grados.
Una de las cosas que más le impactó a la actriz fue el distanciamiento drástico con su padre, Thomas Markle. La tensión en su relación creció solo unos días después de su boda real con el príncipe Harry, cuando la duquesa se enteró de que su padre estaba en conversaciones para vender fotos exclusivas a los paparazzi. Aunque su padre negó todo, ella no le creyó y la polémica continuó creciendo.
Además el progenitor de Markle no asistió a la boda real y se presume que su teléfono estuvo interceptado, sólo la madre de Meghan asistió al momento más feliz de la vida de su hija. El príncipe Harry se culpa a sí mismo de la distancia entre la relación de su esposa y Thomas Markle y el documental expresa: “Lo que pasó fue increíblemente triste. Antes de eso, Meg tenía un padre, y ahora no lo tiene. Me sentí responsable, porque si Meg no estuviera conmigo, entonces su padre seguiría siendo su padre”.
Otra de las cosas que tuvo que aprender Meghan fue a manejar el escrutinio constante de la prensa y también las expectativas de la reina Isabel II. Desde que comenzó su relación con el príncipe Harry hasta llegar al casamiento, la duquesa fue objeto de críticas y especulaciones constantes por parte de todas las personas que tenía a su alrededor. Según el príncipe Harry, esto ha sido una de las cosas más difíciles de afrontar para su esposa.
Con respecto a l documental que ya está disponible en la cadena de streaming Netflix, el padre de Meghan Markle ha confesado: “Harry y Meghan ahora están haciendo todo lo que me dijeron que no hiciera. Me dijeron que nunca hablara. Creo que lo que están haciendo ahora es mucho peor que cualquier cosa que haya hecho antes”.