Después de más de un año de haber estado “escondida”, la princesa Charlene de Mónaco ha comenzado a retomar su ocupada agenda en el Principado de Mónaco. A algunos actos ha asistido en solitario y en otros lo ha hecho en compañía de su esposo, el príncipe Alberto de Mónaco.
Incluso en varias ocasiones ha asistido junto a sus hijos, los príncipes Jacques y Gabriella, quienes ya están dando sus primeros pasos en el mundo de la realeza. El pasado fin de semana los pequeños terminaron su primera semana en un campamento de verano y la princesa Charlene y el príncipe Alberto estuvieron allí para acompañarlos.
“Los príncipes herederos Jacques y Gabriella recibieron esta tarde su diploma "Seadventures Summer Camp" al final de su semana de formación para descubrir la navegación y dar a conocer el mundo marino organizada por el Club Náutico de Mónaco”, asegura un comunicado que compartió el Principado a través de su cuenta oficial de Instagram.
“La semana anterior, los niños principescos habían participado en un curso de iniciación al buceo y salvamento acuático en la academia marina monegasca, la escuela azul”, continúa el comunicado oficial. Después de recibir el diploma y un par medallas, Jacques y Gabriella posaron felices junto a sus orgullosas padres. Charlène lució un look total white y esbozaba una ligera sonrisa mientras su brazo rodeaba a la pequeña Gabriella.
El campamento al que asistieron los hijos de Charlene de Mónaco está abierto a niños y adolescentes entre seis y 17 años que estén interesados en descubrir todo lo relacionado con los deportes náuticos. Entre ellos, vela, esnórquel, remo, kayak y salidas a la bahía. Todas estas actividades, eso sí, dependerán de las condiciones climáticas. Además, los niños dan paseos por la costa y pueden asistir a sesiones con la Policía Marítima para aprender sobre valores y normas a respetar en el mar.