Casa Real de Dinamarca festejó a lo grande con una reunión inédita de gran parte de sus miembros. De esta manera, la familia real danesa tuvo su “foto de verano” con todos sonrientes… o casi todo. Hubo algunas ausencias, pero tenían sus motivos.
El lugar escogido fue en el castillo de Grasten, en el sur de Jutlandia. Fue la reina Ingrid quien tuvo esta idea hacer ya varios años y este verano se ha repetido. Ha sido una imagen que el pueblo de Dinamarca añoraba. Sin dudas, un evento histórico que ha marcado a la realeza, porque no siempre pueden coincidir todos juntos.
Una de las ausencias que sorprendió no ver en la idílica foto fue la de Tatiana Blahnik, la mujer de Nicolás de Grecia. Es que es que se encontraba trabajando en Múnich, Alemania, ciudad de la que es originaria su madre. Tampoco se pudo ver al rey Constantino de Grecia. Quien sí está es la mujer de Constantino, la reina Ana María. La justificación es que Constantino tiene varios problemas de salud.
Otras de las ausencias marcadas de la realeza danesa fueron Pablo de Grecia y su esposa, Marie-Chantal. El matrimonio estaba fuera del país para festejar el cumpleaños de su hija Olympia. Así, no han sido muchos los que están ausentes, aunque se notó su falta. Sobre todo, Constantino, como patriarca.
De todas maneras, la presencia de las hijas de la reina Ingrid, la reina Margarita de Dinamarca y sus hermanas, la reina Ana María de Grecia y la princesa Benedicta, han dicho presente y eso ya es motivo de alegría para el pueblo danés. También estuvieron todos los primos en el castillo de Grasten. Tampoco faltaron la princesa Alexia y su marido, Carlos Morales; el príncipe Nicolás, que acudió sin su mujer Tatiana; el príncipe Philippos, junto a su esposa, Nina Flohr; y la princesa Teodora. Indudablemente, una foto histórica.