Pasó la cumbre de la OTAN en España, pero no fue la única de esas características que se celebró en Madrid. Hace 25 años, los reyes Juan Carlos y Sofía recibían a Bill Clinton, Hillary y Chelsea, su única hija. En aquel entonces, el presidente de Estados Unidos se quedó maravillado por la arquitectura local.
Fue después de un 4 de julio, día de la independencia de Estados Unidos, que Bill Clinton aterrizó en el Aeropuerto Internacional de Son Sant Joan de Palma de Mallorca. Allí, Juan Carlos lideró la comitiva de recepción. Fueron días previos a que iniciar la agenda oficial de la OTAN, que estaba pautada los días 8 y 9 de julio de 1997.
Bill Clinton, Hillary y Chelsea aprovecharon para realizar visitas por la geografía española. Uno de los lugares que más impresionó al presidente norteamericano fue el Castillo gótico de Bellver. “Nunca en mi vida, en Europa, había visto un castillo circular, una construcción tan bella como esta”, comentó a su círculo íntimo.
En aquel entonces, una nutrida comitiva que en la que participaban más de 20 vehículos llegaron hasta el Palacio de la Almudaina. Los Clinton se hospedaron en el antiguo alcázar islámico de la Madina Mayurqa. Una de las noches de su visita, Bill Clinton cenó en Palma e hizo gala de su talento para tocar el saxofón.
Juan Carlos y Sofía cedieron luego su lugar a anfitriones al presidente José María Aznar y su esposa, Ana Botella. Fue ocasión para que toda la comitiva se subiera al Fortuna, el yate de la familia real. Las crónicas de entonces cuentan que el paseo se extendió más de lo esperado y Bill Clinton y Hillary tuvieron que ausentarse de una visita planeada a la localidad de Petra.