La princesa Ana ha sido una de las personas que más apegada a estado a la reina Isabel II durante toda su vida, además nunca se vio envuelta en un escándalo y ha sabido mantener un notable perfil bajo a lo largo de su vida. En los últimos días la royal se ha mantenido junto al ataúd de la reina sin descanso para poder acompañar a su madre.
La princesa real Ana es la única hija mujer que tuvo la reina Isabel II de Inglaterra y es la hermana del flamante rey Carlos III. Cuando el ataúd de la reina pasó frente a ella en el Palacio de Holyroodhouse en Edimurgo, la princesa realizó una reverencia, acto que conmovió a todos los presentes, debido al respeto mostrado por Ana hasta último momento frente a la Reina.
"Ha sido un honor y un privilegio acompañarla en sus últimos viajes. Ser testigo del amor y el respeto mostrado por tantos en estos viajes, ha sido a la vez aleccionador y edificante". "Puede que se nos haya hecho recordar cuánto de su presencia y contribución a nuestra identidad nacional dábamos por sentado”, manifestó la princesa Ana en declaraciones a medios británicos.
La princesa Ana cuenta con 72 años y a lo largo de su vida a realizado diversos trabajos que la han mantenido ocupada y al mismo tiempo fuera del foco de la prensa. La hija de la reina Isabel II es colaboradora de 300 organizaciones benéficas y también en regimientos militares y desde 1970 se desempeña como directora de la Fundación “Save The Children” de Gran Bretaña.
En cuanto a los parecidos con su madre, la princesa Ana es una aficionada a los caballos y a los deportes de equitación, en el año 1976 participó junto al equipo británico de los Juegos Olímpicos de Montreal. Actualmente Ana ocupa el puesto 16 en la línea al trono y ha asegurado que acompañará de la mejor manera a su hermano durante su reinado.