La realeza europea, como en cada familia, tiene sus claros y oscuros como es el caso de Federico de Dinamarca ha sido (por ahora) el último príncipe en abrir la caja de los truenos y actualizar su manera de entender el matrimonio. Su escapada a Madrid, donde ha compartido paseo por El Retiro, visitas a museos y cena en el Corral de la Morería, demuestran la excepcionalidad de su amistad con Genoveva Casanova.
Echando la vista atrás, las infidelidades forman parte de la vida cotidiana de la realeza y su descendencia directa, aunque no imagino a Kate Middleton aceptando tres en su relación, como sí le sucedió a su suegra. Tampoco a las futuras princesas herederas europeas, que han visto en casa lo mucho que sufren las madres o las abuelas por los disfrutes de sus maridos o padres.
La infidelidad en la realeza europea
Uno de los grandes escándalos en la realeza europea fue el de Alberto II de Bélgica, con una lista importante de ilusiones varias y con una hija extramatrimonial que no tuvo más remedio que reconocer después de un largo proceso judicial. Delphine Boël, a sus 40 años, se convirtió en la cuarta hija con derecho a la futura herencia y con acceso a la vida palaciega.
Si de infidelidad hablamos, el duque de Edimburgo, marido de la reina Isabel, tuvo alternancias amorosas que eran conocidas por la regia esposa, que llegó a decir: “No pido fidelidad (a su marido), sino lealtad”. Y así fue hasta que falleció en abril del 2021. Su 'amiga especial', Lady Penny Brabourne, con la que se le fotografió en muchas ocasiones, tuvo acceso al funeral de Estado de duque.
Por supuesto de si de escándalo en la realeza europea hablamos, es imposible no mencionar a Lady Di y el entonces príncipe Carlos. Después, ya fue la propia Lady Di la que señaló que “en nuestro matrimonio éramos tres”. La muerte de Diana facilitó la vida amorosa del monarca. La boda y la coronación hicieron de Camila Parker Bowles la única historia de amantes con final oficial.
Para finalizar de las infidelidades y la realeza europea, el rey emérito Juan Carlos fue una gran protagonista. Sus complicaciones legales comenzaron, como suele suceder, por dinero. Los famosos 65 millones que Corinna Larsen aseguraba que eran un “regalo” de don Juan Carlos. Era la primera vez que una de las muchas relaciones extramatrimoniales que tuvo el padre de Felipe VI le colocaba en una situación judicial. Hasta ahora, las amantes de los royal callaban salvo que hubiera que reconocer a 'hijos del amor', como ha sido, en muchas ocasiones, los descendientes de la nobleza y realeza.