El mundo de los royals tiene mucho que ver con la imagen, las apariencias y por sobre todo, los actos de presencia. Es sumamente importante para los integrantes de este mundillo aparecer en cuanto acto oficial que esté vinculado al mundo de la realeza o de los países importantes de todo el mundo. Esta es una verdadera cuenta pendiente para la princesa Leonor de España.
Es que es una realidad y un hecho muy comentado que la princesa de todos los españoles ha tenido hasta el momento un perfil exageradamente reservado teniendo en cuenta que su vida y su posición la convierten incontestablemente en un figura más que pública. El hecho de ser la próxima heredera a la corona española hace que su imagen sea solicitada desde niña y lo será a lo largo de toda su vida.
La mala noticia para la princesa Leonor es que sus pares de otros países cuentan con perfiles completamente distintos al de ella. Por tomar un ejemplo, están las princesas Amalia de los Países Bajos y Elisabeth de Bélgica quienes son reconocidas a nivel europeo ya que llevan mucho tiempo realizando una agenda oficial que las ubica en los actos más importantes y hace que sus caras sean mucho más visibles que las de las princesas españolas.
Por tomar dos claros ejemplos, recientemente fue la coronación del Rey Carlos III en Inglaterra, sin duda el evento más importante del año a nivel royal. Por supuesto que las princesas de los Países Bajos y de Bélgica acudieron al evento, mientras que por parte de España solo fueron los reyes Felipe y Letizia.
La última oportunidad llegaba este jueves en la multitudinaria boda del príncipe Hussein y Rawja Al Said, pero ni estaba ni se la esperaba. De hecho, fueron los reyes eméritos quienes se reencontraron en Jordania para disfrutar del enlace.