Tras cumplir 53 años, Máxima de Holanda se trasladó este lunes a Filipinas como asesora especial de la ONU. Su viaje durará tres días y comenzó ayer por la noche, aterrizando en el aeropuerto de Manila. Pese a que normalmente suele apostar por colores llamativos, apareció con un look sobrio de chaqueta negra y bailarinas destalonadas en dos colores de la marca alicantina Toral. Durante el segundo día, visitó Isla Talim para conocer una comunidad pesquera en la que volvió a apostar por los estampados. En concreto, optó por el vestido ‘Axelle’ de la colección de Vanessa Seward en colaboración con Bloom Paris, a la venta por 195 euros. Es una prenda frecuente cuando viaja a países con clima tropical y también la utilizó en 2022 para visitar Tanzania.
Vestuario significativo
Al igual que en aquella visita, Máxima volvió a combinar el vestido con unas sandalias de rafia. Están hechas a mano con tejido tradicional marroquí y pertenecen a la colección de Carrie Forbes. Además, añadió un sombrero en tono camel con cinta oscura que, tras los últimos incidentes, optó por quitar en cuanto el viento amenazaba con volárselo. Sin embargo, lo novedoso de este look fue el bolso, que a su vez fue un guiño a su país natal. En concreto, un diseño nuevo de LH Tejidos en azul marino, hecho a mano por mujeres tejedoras de Loma Hermosa, una localidad argentina cerca de Buenos Aires. Este gesto resalta la importancia de apoyar causas humanas a través de elecciones de moda conscientes, algo que Máxima y Letizia de España comparten.
El impacto de las elecciones de moda
Letizia de España, quien también es conocida por su compromiso con causas humanas, es asidua a vestir de APRAMP, un colectivo que rescata a mujeres víctimas de la explotación sexual. Esta elección no solo destaca su apoyo a las causas humanas, sino que también refleja su interés por promover el empoderamiento de las mujeres a través de la moda. Al igual que Máxima, Letizia usa su influencia para dar visibilidad a colectivos que trabajan en favor de los derechos humanos. En cada aparición pública, ambas reinas envían un mensaje poderoso sobre la importancia de apoyar causas humanas a través de sus decisiones de vestuario.
Conexión con la comunidad
No solo se subió a un barco, también se acercó a una de las típicas tiendas ’sari-sari', populares porque se venden artículos cotidianos. Muchos fueron los sorprendidos que se acercaron a saludar a la argentina. El viaje de Máxima finalizará este miércoles con una reunión con un grupo de mujeres en Manila para hablar sobre la contribución de los servicios financieros y su salud. Este encuentro resalta la importancia de las causas humanas en las que ambas reinas están involucradas, utilizando su posición para influir positivamente en la vida de otras mujeres.
El compromiso de Letizia y Máxima con las causas humanas no es algo pasajero. Ambas reinas han demostrado a lo largo de los años su dedicación a mejorar la vida de las mujeres y apoyar iniciativas que promuevan la igualdad y los derechos humanos. Este compromiso se refleja en cada elección de vestuario, cada evento público y cada proyecto en el que se involucran. A través de sus esfuerzos, Letizia y Máxima continúan inspirando a otros a unirse a la causa y hacer una diferencia significativa en la vida de las personas.