Hace 66 años Grace Kelly se casó con el príncipe europeo Raniero II de Mónaco. Ese matrimonio no pasó desapercibido en el mundo artístico y dio que hablar en su época. Ese día la actriz lució un vestido de boda que luego sería el más copiado de la historia.
Un vestido de boda que Grace Kelly no le gustó para nada pero terminó siendo maravilloso para un montón de mujeres que lo eligieron como modelo. Sin dudas fue el más copiado de la historia y que aún sigue vigente. Todas las novias del mundo quisieron tener uno de ese estilo.
El vestido de la boda de Grace Kelly fue un regalo de la empresa de Hollywood Metro Goldwin Mayer a la princesa de Mónaco. La diseñadora fue Helen Rose quien era la encargada de vestuarios de la productora de películas. El costo fue de 60 mil dólares.
La diseñadora del vestido de boda de Grace Kelly se inspiró en otro realizado para Dorothy McGuir. La actriz fue una de las protagonistas de la película Invitación. El vestido consistía en un escote corazón y una falda corola de tafetán de seda con fajín.
Los detalles del vestido de la boda de Grace Kelly fueron copiados desde aquel 19 de abril de 1956. Varias celebridades hicieron honor a este diseño. Este año la modelo Jasmine Tookes se casó con Juan David Barrero con un vestido inspirado al de la actriz estadounidense.