La reina Máxima de Holanda sigue con su agenda cargada de actividades. En esas tareas diarias, la mujer del rey Guillermo siempre se hace lugar para lucir un look que la diferencie del resto. Esta vez fue por un detalle que dio que hablar, un accesorio inesperado que causó gran repercusión.
Después del último gran evento para la realeza europea, como fue en el servicio religioso de Acción de Gracias en recuerdo del duque de Edimburgo, la reina Máxima y el rey Guillermo retomaron sus agendas en los Países Bajos. Juntos o separados, Máxima sabe cómo destacarse cuando hablamos de moda y looks jugados, sobre todo para una royal de su estatura.
La última sorpresa que nos ha brindado Máxima fue en la visita a la compañía High Eye, ubicada en Dordrecht, que se especializa en construir helicópteros no tripulados. Allí, la consorte tuvo diálogo con ellos ejecutivos de la empresa para auspiciar inversiones en pymes. Un detalle de esa visita fue ineludible: el collar que lució la esposa de Guillermo.
El accesorio que lució la argentina y se que llevó todas las miradas fue un collar con mejillones, sí, con mejillones. El colgante es obra de una particular diseñadora germana, Ineke Otte, quien tiene una extensa carrera en el mundo del diseño y ha recibido diferentes proemios. Incluso, ha expuesto su obra en el museo MOMA de San Francisco.
Este collar con mejillones, si te interesa, se puede conseguir en la tienda web de la diseñadora por 150 euros en su versión más sencilla (también hay con incrustaciones de diamante). Para Máxima de Holanda, ser noticia por los accesorios que usa o por la elección sobre su look no es para nada llamativo. La mujer que cumplió el sueño de ser princesa primero y reina después, los colores llamativos y los accesorios originales han sido parte de su estilo desde hace años.