Leonardo DiCaprio es uno de los actores y productores más talentosos y exitosos de Hollywood. El protagonista de "Titanic" estrenó recientemente un documental que habla sobre cómo era ser un actor adolescente en los años 90, pero la trama del proyecto también se habla sobre sobre una generación de actores que brillaron pero también perdieron la vida en el camino.
El documental producido por DiCaprio cuenta con testimonios en primera persona de la actriz Soleil Moon Frye, quien incluso es la autora de casi todo el material fotográfico que se aprecia en el documental. Soleil saltó a la fama gracias a su trabajo en la sitcom "Punky Brewster", donde ella interpretaba a Penélope, la vivaz protagonista de la producción de la NBC de David W. Duclon.
Una vez que finalizó su participación en "Punky Brewster", Soleil Moon Frye decidió tomar su cámara y grabar las salidas y reuniones que tenía con sus colegas de aquel entonces como Leonardo DiCaprio, Sarah Gilbert, Brian Austin Green, David Arquette y Mark Wahlberg. Además, Moon Frye captó con su cámara las realidades que vivían Jonathan Brandis y Shannon Wilsey, cuyos respectivos suicidios alteraron la dinámica de un grupo profundamente unido.
El documental de Soleil Moon Frye está disponible en DirecTV GO y en HULU, y fue producido por Leonardo DiCaprio a través de su compañía Appian Way Productions, e se puede ver al actor en varias fotografías y videos del documental. DiCaprio aseguró que le cautivó la idea de mostrar cómo se vivía en aquella época, y lo difícil que era triunfar en Hollywood cuando no existía la inmediatez o las redes sociales.
Tanto Frye como DiCaprio también quisieron rendirle un homenaje a Jonathan Brandis y a Shannon Wilsey. En cuanto a Jonathan Brandis, el actor de la secuela de "La historia sin fin" que ya era famoso a los nueve años por su personaje de Kevin Buchanan en la serie "One Life to Live", había forjado un lazo entrañable con Soleil. Sin embargo el joven se fue alejando de Hollywood, comenzó a ser rechazado en varios proyectos, y años después, el 12 de noviembre de 2003, Brandis se quitó la vida.
“Me contaron que hacía años que arrastraba una depresión y que el fracaso de una película que hizo, el no haber logrado ser a los 27 años el actor famoso en el que siempre anheló convertirse, lo llevaron a tomar esa decisión”, cuenta Frye en el documental "Kid 90".