Qatar ha hecho una gran campaña para alentar a todo el mundo, independientemente de su raza, orientación sexual o religión a visitar Qatar y vivir con todas las libertades este mundial de Qatar 2022 que en teoría es para todos y todas. A sabiendas de que todo el mundo conoce la idiosincrasia y manera de vivir de los qataríes es que muchos consideraron directamente no tocar suelo árabe ya que consideraban que no se sentirían del todo cómodos.
La organización afirmó que muchas de las cosas que se conjeturaban en cuanto a las prohibiciones eran falsas y que todo era posible durante el mundial, es decir, las prácticas más occidentales como las muestras de afecto, el alcohol o nuestro código de vestimenta tradicional continuarán con normalidad.
La realidad es que a medida que se acerca el mundial las cosas van mutando a peor y van surgiendo ciertas prohibiciones que se daban por imposibles en un comienzo. “Todo el mundo será bienvenido en Qatar, pero por favor respeten nuestras normas y nuestra cultura” suena como una amistosa amenaza. Tienes toda la libertad del mundo pero debes atenerte a las consecuencias si nos enojamos. Las pruebas de afecto entre personas del mismo sexo no están permitidas es uno de los puntos más controvertidos de este mundial. Es decir, la comunidad LGTBI puede ir al mundial, pero de brazos cruzados. No sean afectuosos y cariñosos con sus seres amados porque puede ir 7 años presos. No suena muy convincente.
El consumo de alcohol también está penalizado por ley. Se han elaborado las “fan zones” donde se podrá consumir alcohol de manera discreta, pero en la que pongas un pie en la vereda y tengas una mili gota de alcohol en sangre te pueden detener, tampoco suena muy alentador.
Por último, que no se te vea un hombro porque eres todo un exhibicionista y puedes alterar la calma de los locales, el código de vestimenta es hombros y piernas cubiertos completamente, prepárate a sudar mucho si sales a los 35 grados de calor que se esperan en esas latitudes