La vida de las famosas y de las personalidades de nuestro medio pareciera ser que son todo color de rosas y una oda a la alegría. Siempre están mostrando en redes sociales lo perfecta que son sus vidas, sus increíbles viajes y toda la alegría con la que viven las 24 hs del día, Pareciera ser que tener problemas o dificultades es un pecado y que está prohibido tener algún que otro percance o tropiezo en nuestro día a día.
Por suerte aún quedan celebridades que no tienen vergüenza en mostrar cómo es en verdad la vida, que no todo son las apariencias y que las cicatrices también nos pueden dejar un mensaje positivo en la vida, como un mensaje del cuerpo que nos recuerda que las cosas tienen un valor.
La primera celebridad es la auténtica y genuina Tamara Gorro. La influencer no tiene ningún problema en comentar sus problemas de depresión y lo mucho que le está costando salir. A su vez tuvo que realizarse una operación para retirar la vesícula y siempre muestra con orgullo sus cicatrices luego de la cirugía.
Otra bella modelo que no oculta sus desperfecto físicos es Sara Carbonero quien se enfrentó a un cáncer de ovario y una cicatriz en su estómago le recuerda todos los días lo fuerte fue al soportar todo ese tramo de su vida tan complejo
Finalmente Marisa Jara debió atravesar tiempos muy difíciles cuando le diagnosticaron cáncer de colón y luego de útero por lo que tuvo que soportar varias cirugías incluída la información de que sería complicado que pudiera tener hijos. Con el tiempo y tras un riguroso tratamiento logró tener a su tan ansiado hijo. Todas ellas tienen en común que no ocultan sus cicatrices y que aún así pueden ser sumamente felices y llevar una vida normal.